dimecres, 24 de setembre del 2008


1º DE BACHILLER. LISTADO DE CONCEPTOS (Por orden de aparición)

Innato: (innatus, natural en) Lo que se posee por nacimiento y es natural, es decir, opuesto a adquirido. Son innatas las conductas directamente determinadas por instintos, de manera que podemos hablar del parpadeo instintivo, el instinto sexual… pero también de conductas más complejas como la agresividad innata. La escuela innatista, que encuentra un precedente lejano en Platón, se asocia a la filosofía racionalista del XVII y en especial de Descartes, defiende la presencia en la mente humana de ideas innatas, es decir, principios básicos del entendimiento que no requieren experiencia sensible. Así, según esta doctrina, son ideas innatas Dios y el alma o los conceptos matemáticos. Estos conceptos no aparecen desarrollados en la mente ni cualquier entendimiento accede a ellos necesariamente. Se trata de esquemas básicos que tendemos naturalmente a formar.

Definición: (definere: señalar límites). Definir es ofrecer la esencia de algo. A la pregunta ¿qué es X?, daríamos cuenta de la naturaleza de ese ser, de sus características constitutivas. Es esencial en un ser aquello sin lo cual este no puede supervivir. Así, si digo que la esencia del hombre es la razón, debemos entender que el hombre queda enajenado, extraño a sí mismo, en la medida en que "pierda la razón". De igual manera, si una silla deja de servir para sentarse, lo cual es esencial en ella, entonces ya no puede cumplir la definición del concepto "silla". Hay una forma de definición no esencial que es la llamada definición extensional. En este caso, enumeramos los casos posibles en los cuales se cumple el concepto. Así, definir la extensión del concepto "baloncesto" supondría nombrar por ejemplo equipos o jugadores; si hubiéramos de definir "Estado" daríamos todos los nombres de Estados que conocemos…

Mythos/Logos: (Mythos: relato; logos: nación) El mito es una narración, normalmente protagonizada por héroes o dioses que se transmite como ejemplo de comportamientos y valores significativos para la comunidad. A través del mito, los pueblos se representan figuradamente su origen, su lugar en el mundo y su destino. En las sociedades tribales, y acaso también en las sociedades civiles, los mitos contribuyen a la cohesión del grupo.
Con el logos, las explicaciones míticas y los relatos del origen pasan a ser sustituidos por explicaciones y argumentos. El primer fenómeno histórico de tránsito del mito al logos lo tenemos en la antigua Grecia, cuando los filósofos presocráticos se refirieron a la materia primigenia, por ejemplo el agua en Tales de Mileto o el aire en Anaxímenes, para dar una explicación del origen y composición del mundo sin recurrir a las viejas narraciones mitológicas. En el siglo XVIII, se moderniza este fenómeno, cuando los ilustrados afirman que la Diosa Razón rompe las tinieblas de la superstición que han mantenido históricamente al hombre en condición de siervo.

Creacionismo: Crear supone extraer algo de la nada o, al menos, producir algo que antes no estaba, aunque sí le preexistieran los elementos que lo conforman, tal y como sucede con el barro que el artista utiliza para crear su estatua. Las doctrinas creacionistas defienden la idea de que el origen del mundo es la creatio ex nihilo, la cual, influida por la concepción judaica expresa en el Antiguo Testamento, se opone a la concepción grecolatina de la existencia de una materia universal eterna y que preexiste a los seres. Solidaria de la concepción religiosa creacionista es la teoría científica denominada fijismo, reacción característica del siglo XIX contra el evolucionismo y que apuesta por la inmutabilidad de las especies vivas.

Evolucionismo: Doctrina científica surgida en el siglo XIX y que defiende el carácter mutable de las especies. Inspirados en las doctrinas de Spencer, para el cual todo es producto de la evolución -tanto las especies como la materia inorgánica como las sociedades humanas- los naturalistas partidarios de esta concepción defendían con pruebas experimentales de todo tipo que existía la filogénesis, es decir, que cada especie ha pasado por diversas fases de desarrollo hasta llegar a su morfología actual, habiendo sufrido trances de especiación, es decir, de haberse separado de un tronco común del que formaban parte, como se evidencia por ejemplo en el hombre y las distintas familias de simios.
La teoría de Lamarck defiende la evolución en base a la idea de que se heredan los caracteres adquiridos, lo cual explica la especiación a partir de transformaciones orgánicas que se crean por necesidad y se van transmitiendo gradualmente de padres a hijos. El mecanismo que determina este proceso podría ser el de la necesidad, de tal manera que mientras unos órganos –por ejemplo los colmillos entre nosotros- se atrofian por desuso, otros varían y se desarrollan para un uso nuevo, como ocurre con el largo cuello de la jirafa, de ahí la frase "la función crea el órgano".
El lamarckismo ha sido definitivamente superado por la concepción darwiniana de la selección natural, según la cual en la dura competencia por la supervivencia sobreviven los más aptos. Los cambios son azarosos y normalmente deletéreos o negativos para el sujeto que los sufre, pero ocasionalmente un sujeto anómalo –en cierto modo un monstruo, como el mono que camina erguido o el oso albino- sufre un cambio que refuerza su situación en la lucha por la vida, de manera que su carácter termina siendo seleccionado y extendido. El mutacionismo contemporáneo recoge esta teoría para sintetizarla con los descubrimientos de genética de Mendel, cuyos experimentos explican cuáles son los mecanismos que desencadenan los errores de transmisión de la herencia –las mutaciones- generando sujetos mutantes y la posibilidad de una transformación de tipo filogenético.

Platón. Filósofo griego del siglo V (a.c), probablemente el más determinante en la historia del pensamiento, de ahí que se llegue a decir que la Filosofía es Platón y todos los demás autores son notas a pie de página. Discípulo de Sócrates y maestro de Aristóteles, reflejó su doctrina –en especial la Teoría de las Ideas- en sus obras dialogales –de entre las cuales destaca La República- donde pone todas sus concepciones en boca del maestro Sócrates. Platón apuesta por el valor universal e inmutable de los principios básicos del conocimiento, la moral y la política, de manera que la ciencia –epistemé- es el arma maestra contra la corrupción de la Polis y el relativismo de los sofistas.

Taxonomía: criterio razonado de clasificación de los tipos de especies animales y vegetales.



Sofistas: (sophós: sabio, sophia: sabiduría) Corriente de pensadores denominados por el vulgo "sabios" o "filósofos" a los que Sócrates y Platón tachaban de farsantes e impostores. Encontraron su escenario histórico perfecto en el ágora ateniense del siglo V –conocido como Siglo de Pericles o Siglo de Oro de Atenas- especialmente en los tiempos de la democracia. En la escena pública, tribunales y asamblea popular, su verbo fluido, su liderazgo y su astucia les permitía influir sobre la ciudadanía e inclinar las decisiones asamblearias en su propio interés. Fundaron escuelas a las que se pagaba por asistir y donde se enseñaban las disciplinas que, como la Oratoria o las Leyes, propiciarían el acceso del individuo al éxito social. Protágoras, autor de la frase "el hombre es la medida de todas las cosas", defiende la doctrina del Relativismo, según la cual la verdad no puede tener valor universal, de manera que lo que llamamos verdadero resulta siempre de criterios subjetivos y puntos de vista personales y limitados. No hay pues verdad en el sentido platónico o universal, sino más bien opinión. En un sentido cercano se pronuncia Gorgias, padre del escepticismo, doctrina según la cual el conocimiento, entendido como la adecuación perfecta y absoluta de mi pensamiento a lo real, es una ilusión imposible, lo cual supone que el conocimiento, propiamente dicho es una fantasía que termina imponiéndose por la fuerza y ahoga la libertad de creencia.
Sócrates y, por ende, Platón se enfrentaron durante años a los sofistas, a los que acusaban de haber deteriorado la integridad moral de la polis con la relajación moral que extendía su relativismo.

Convención: aquello que ha sido acordado o pactado. La frase de Protágoras –el hombre, medida de todas las cosas- implica que todo aquello a lo que llamamos comúnmente verdadero no es sino el resultado de un acuerdo entre personas. Así, la palabra "árbol" designa la realidad que designa por la misma razón por la que hemos convenido que los dioses nos protegen, los atenienses son especies de "antropós" superiores a los extranjeros y bárbaros o comer perro es malo y comer conejo es bueno. Tales criterios son relativos a los contextos espaciales y epocales, es decir, ahora odiamos la tortura pero en el siglo XVII era una verdad aceptada que podía ser buena, y en España comemos cerdo, cosa que entre los árabes es repugnante.

Hedonismo (hedoné: placer) Escuela surgida en la Grecia tardía o helenística y que determina la conquista del placer como fin último de la vida humana. Atribuimos sus contenidos filosóficos más poderosos a Epicuro, cuya concepción hedonista ha sido históricamente desprestigiada por la tradición cristiana, que aún hoy nos hace hablar negativamente del "hedonismo irresponsable y la relajación de costumbres". Pero Epicuro intenta enseñarnos cómo cuidar de nosotros mismos, alcanzando la sabiduría necesaria para hacer los placeres duraderos. Designa que el principio del placer es la ausencia de dolor, de ahí que, al tiempo que aconseja el uso inteligente de placeres como el vino o el amor, desaprueba los excesos, que terminan conllevando la enfermedad y, en consecuencia, la extinción del placer. Es hedonismo inteligente aquel que diferencia entre placeres a largo plazo como la amistad, el arte o el amor, y placeres inmediatos o a corto plazo, como la comida, el sexo o el descanso.

Ilustración (lux: luz) Metafóricamente, asociamos la luz al conocimiento y las tinieblas a la ignorancia. En la historia, la Ilustración o Siglo de las Luces (XVIII) es la época en la que, según Kant, "la especie humana abandona su culpable minoría de edad". Los Ilustrados proclamaron el triunfo de la Diosa Razón frente al oscurantismo, que asociaban al dogmatismo y la superstición propia de las sociedades teocráticas medievales. Creían que el saber y la ciencia iban poco a poco haciendo la luz sobre las nieblas de la ignorancia y construirían un mundo más feliz y habitable para el hombre. La educación y la extensión del conocimiento a través de la Enciclopedia serían el motor de ese proceso de iluminación, el cual llevaría al progreso, entendido como la acumulación y uso del conocimiento a través de las generaciones, que ha de llevar a un mundo cada vez mejor. Con todo ello, la humanidad se libraría del peso de los grandes poderes míticos, la iglesia y la aristocracia, que se habían esforzado por mantener durante siglos a la plebe en la ignorancia para asegurar su servidumbre. Esta concepción mantuvo a los ilustrados franceses en conflicto durante el siglo XVIII contra el Antiguo Régimen, de ahí que la Revolución Francesa de 1789, que derrocó la monarquía absoluta y el poder de la nobleza, sea considerada como una de sus consecuencias. Entre los grandes ilustrados destacamos a Voltaire, Rousseau y Montesquieu, además de los padres de la Enciclopedia, Diderot y D´Alembert. Fuera de Francia debemos referirnos al alemán Kant, al inglés Locke o al valenciano Mayans i Ciscar.


Estado de Naturaleza. Concepto hipotético o imaginario propio de la tradición del Contractualismo, cuyos autores defendían que el hombre abandona su condición salvaje y abraza una forma comunitaria de vida a través de un gran pacto social o contrato, el cual supone la entrega del poder político a una minoría de personas, las cuales a cambio habrán de garantizar ciertos derechos naturales a los súbditos, como la vida, la propiedad o la libertad.
Para Hobbes, el Estado de Naturaleza es una "Guerra de todos contra todos", de ahí su famosa afirmación "homo homini lupus". La condición natural del hombre es el egoísmo absoluto, de manera que, si se nos deja actuar en plena libertad, terminamos destruyendo al vecino para satisfacer cualquier necesidad, por mínima que sea. La única manera de asegurar la supervivencia es convenir la entrega del poder a una institución política autoritaria, un gran Estado castigador o Leviatán, capaz de disuadir a los súbditos de la violencia haciéndoles sentir terror. Rousseau, por el contrario, defensor de la idea del "buen salvaje", cree que el Estado Natural es relativamente pacífico e incluso plácido, pues el hombre tiende por naturaleza a no agredir ni a buscar a los demás mientras no los necesita. El problema de la condición salvaje es que deja al hombre en situación de anquilosamiento, sin posibilidad de transmisión del conocimiento ni de mejora. Si el hombre pacta la renuncia a su absoluta libertad de salvaje es solo a cambio de que el nuevo estado respete no solo su vida sino en especial su libertad. Podemos considerar que Rousseau es un precursor de la democracia.

Polis: Ciudad-Estado característica de la Antigua Grecia. La polis, por ejemplo la Atenas del Siglo V, presume de tener capacidad de autogestión, de ahí el complejo de superioridad de los griegos, que creían poder dirigir racionalmente su vida comunitaria a través de la política, al contrario que los bárbaros, tribus dirigidas por el instinto o por poderes irracionales u hordas nómadas, incapaces de establecer instituciones civiles como las de los griegos.



Inteligencia: (inter lligare: unir o ligar entes separados) Hay cierta tendencia a asociar la inteligencia con el entendimiento o la comprensión, es decir, con facultades propias de un ser racional. Desde tal punto de vista, habríamos de convenir en que sólo el ser humano es propiamente "inteligente". Hay quien la define como la capacidad para adaptarse a situaciones novedosas, es decir, para adquirir respuestas no programadas ante estímulos no previstos. En este caso diríamos que la inteligencia es propia de animales superiores, desde simios hasta aves y otros sistemas nerviosos complejos. Nos quedaremos con la definición que permite una mayor extensión en los tipos de conducta, de manera que inteligencia sería la capacidad de un sistema nervioso para actuar ante el medio, afrontando y solucionando problemas relacionados con la supervivencia, la protección, la reproducción, etc… La forma más básica de inteligencia es la instintiva, presente en todas las especies animales y que se desarrolla a partir de la herencia genética. La respuesta instintiva es una pauta fija de acción que tiende a responder de manera inmediata y automática. La inteligencia por ensayo-error supone mayor complejidad, pues en ella el individuo prueba distintas posibilidades hasta que por casualidad da con la respuesta acertada. Entonces "fija" dicha respuesta acostumbrándose a aplicarla en todos los casos. La inteligencia imitativa, exclusiva de animales superiores, implica la fijación de una respuesta acertada a través de la observación de conductas ajenas. Finalmente, la conducta racional, exclusiva de los seres humanos, aunque se atribuye entre los biólogos a algunas especies mamíferas en estado muy embrionario –como los chimpancés o los delfines-, es la más compleja y sofisticada. Supone la intervención del entendimiento, cuyo contenido son realidades abstractas llamadas conceptos.

Enculturación: Proceso de transmisión de conocimientos, actitudes, valores, creencias, idioma, etc… de unas generaciones a otras. Los grandes agentes tradicionales de la enculturación son la familia, la escuela y la iglesia.

Cultura: (Cultus, acción de cultivar algo) Tendemos a referir cultura al conjunto de producciones intelectuales que, al acumularse, dan lugar a la persona culta o instruida. De esta manera, la obra de Cervantes o un manual de legislación son cultura, pero no los aperos de labranza o el idioma. Esta definición resulta estrecha. Hoy diríamos que es la totalidad de conocimientos, creencias, artes, técnicas, leyes, moral, costumbres que constituyen la vida de una comunidad y de cada individuo que la forma. Todo pueblo, tribu o comunidad tiene un proyecto, diseño o esquema de pautas de conducta que habitan explícita o implícitamente en nosotros, que se constituyen históricamente y que, por encima de todo, establecen las bases de la convivencia.

Ciencias Humanas: En el uso tradicional, llamamos "Humanidades" a los estudios de la cultura, saberes básicamente reflexivos cuyo criterio de verdad no se restringe al puro cálculo ni a la pura experimentación, sino que se basa más bien en la reflexión y en la coherencia del discurso. Encontramos así la Filosofía, los saberes filológicos, la Historia o el Derecho. En el siglo XIX empieza a hablarse de "ciencias humanas" a aquellos "saberes del hombre" que, como las ciencias físicas, son capaces de integrar en sus procedimientos métodos propios de las ciencias experimentales y cuantificacionales. Así, nos encontramos la Economía, la Antropología, la Sociología o la Psicología.

Etnografía: (Etnós: raza; grafós: escritura, descripción) Fase inicial del estudio antropológico. El etnógrafo viaja a pueblos exóticos, preferentemente salvajes y los observa anotando cuidadosamente sus formas de vida, costumbres, pautas morales… En aras de perfeccionar su investigación, puede llegar a vivir entre ellos, integrándose mediante el aprendizaje de la lengua y la adquisición de sus hábitos de vida. El verdadero antropólogo es más bien el etnólogo, es decir, el investigador que recoge los informes del etnógrafo para establecer teorías sobre aspectos de relevancia filosófica como la naturaleza humana, la enculturación, la religión, etc…

El Niño de Aveyron: En el siglo XVIII apareció en una localidad francesa un niño-lobo o niño salvaje. Al parecer habría sido abandonado al nacer y cuidado por una loba, de tal manera que los cazadores que lo descubrieron llegaron inicialmente a confundirlo. Creó un gran interés entre los intelectuales ilustrados porque en aquel tiempo era tema de debate la naturaleza humana, que implicaba el interrogante sobre la existencia del alma, de manera que vieron en Víctor la posibilidad de llegar a conclusiones. Fue educado durante meses por un pedagogo que lo sacó de su condición salvaje y le hizo aprender muchas cosas. No puede decirse, sin embargo, que llegara a socializarse ni a desarrollar una conducta propiamente racional; Víctor había sido enseñado como lobo en sus años clave de desarrollo mental y ya difícilmente podría transformarse en otra cosa. Esto demuestra que la inteligencia humana, más que algo concreto y determinado, se caracteriza por su plasticidad, es decir, su radical apertura, como una hoja en blanco que puede adaptarse al hábitat en el que se forme.

Difusión cultural: Según muchos antropólogos es el proceso por el cual se transmiten los conocimientos e innovaciones culturales de unas tribus a otras. Descubrimientos como el del fuego no serían en la mayoría de tribus autóctonos, sino resultado de alguna imitación.

Etnocentrismo ( ) Equiparable al racismo, complejo de superioridad propio de una raza. Esta no solo cree que su constitución física y su inteligencia son superiores, sino que sus costumbres, creencias y hábitos de vida en general son "naturales" o "normales", de manera que las pautas diferentes de los demás pueblos son degradaciones o anomalías. La doctrina nacional-socialista declara la superioridad de la raza aria o germánica, y, de igual manera, los judíos tienden a considerarse pueblo elegido por Dios. Históricamente, los pueblos de origen europeo han sido fuertemente etnocéntricos, lo que explica la perduración hasta el siglo XIX de las prácticas esclavistas legales.

Determinismo biológico: (determinare: señalar los límites) Principio según el cual los organismos no racionales, en especial los sistemas nerviosos simples, no tienen capacidad de adaptación o de variabilidad de respuestas, de manera que el sistema de pautas fijas de acción transmitido a través del código genético determina prácticamente todas las conductas del individuo.




Aristóteles: Discípulo de Platón y fundador del Liceo, se le reconoce también por haber sido maestro de Alejandro Magno. El sistema de conceptos filosóficos de Aristóteles es el más influyente de la historia por su totalidad, densidad y rigor, de ahí que todo el pensamiento de la Edad Media esté profundamente tiznado de aristotelismo. Aristóteles funda la lógica clásica, que da cuenta de los principios básicos del pensamiento posible, como el de identidad, negación o no contradicción, así como los silogismos.

Axioma: verdad tan evidente que no necesita de demostración. Los principios básicos de la Lógica, como el de identidad, son axiomáticos, y sin ellos no pueden demostrarse o deducirse los demás principios.

Razón (logos) Facultad que asociamos al poder para regular la acción a partir de cierto nivel de abstracción determinado por el uso del lenguaje, facultad para inteligir o reflexionar y hacer uso de conceptos para acceder a lo verdadero. Se asocia también a la capacidad para establecer un razonamiento, es decir, para establecer consecuencias correctas a partir de principios conocidos.

Intuición / Concepto: Coloquialmente hablamos de "intuir" en el sentido vago de "presentir", es decir, experimentar algo de manera vaga e improbable. Filosóficamente, debemos entender intuición como "intuición empírica", es decir, como la experiencia por la cual una sensación se refiere a un objeto. El concepto es la representación intelectual de una imagen. Mediante el entendimiento, trascendemos la sensibilidad, que se revela como pasiva frente al carácter activo de aquél. Según Kant, el conocimiento es posible por la síntesis entre los dos ámbitos, de ahí su afirmación "los conceptos o categorías sin sensaciones son vacíos, las sensaciones sin conceptos o categorías son ciegas". Sin embargo, hay que diferenciar con precisión ambas cosas, pues el concepto es espiritual o abstracto mientras la sensación es material o concreta… de igual forma el concepto es universal y la sensación es singular.


Ciencia. (epistemé o scientiae) Llamamos así al saber con fundamentos y con validez universal e independiente de la opinión. Platón llama científico o epistémico al conocimiento capaz de establecer enunciados universales y necesarios, de ahí que sitúe a la Filosofía, capaz de acceder a las ideas más abstractas, en lo alto del edificio del conocimiento, incluso por encima de las matemáticas y, por supuesto, de las opiniones. Todo modelo científico debe aclarar el status de lo verdadero, es decir, debe clarificar su propio criterio de demarcación de los enunciados verdaderos y los falsos. Así, las ciencias físicas se sirven de criterios empíricos o experimentales (verdad como correspondencia), mientras que las ciencias formales como la lógica o las matemáticas determinan como verdaderos los enunciados que se ajustan a las reglas que constituyen el sistema (verdad como coherencia). También podemos decir que las primeras son inductivas y las segundas deductivas.






Deducción/ Inducción. Un razonamiento deductivo consiste en una serie de enunciados iniciales o premisas de los cuales deriva necesariamente una conclusión. La validez de una deducción es puramente formal o racional, no requiere comprobación empírica, de manera que si decimos que "todos los hombres son mortales y que Sócrates es hombre", la conclusión "Sócrates es mortal" se habrá de considerar necesariamente válida sin que se requiera contrastar el hecho en la experiencia. Una inducción es aquel razonamiento o inferencia en que la comprobación en la experiencia de una serie de casos particulares da lugar a una ley o regla general. Así, razonamientos del tipo "los insectos tienen seis pares de patas" o "las familias desestructuradas son propensas a generar fracaso escolar en mayor medida en los niños" son del tipo inductivo.

Objetividad. (objectum: objeto) Se habla de hacer juicios objetivos por oposición a los "subjetivos", que se asocian a lo aparente e irreal y que no tienen más validez que la puramente personal. Somos objetivos cuando aludimos a realidades que tienen validez universal y que subsisten por sí mismas, es decir, que son lo que son con independencia de las perspectivas de quienes las observan. El comportamiento científico necesita ser objetivo, dado que cuando un enunciado viene condicionado por opiniones, estados de ánimo o expectativas personales, entonces la posibilidad de que el enunciado sea válido resulta más difícil.

Progreso: Fe en el avance de la especie humana en el tiempo. Los ilustrados del siglo XVIII pensaban que la historia discurría "hacia mejor" porque el hombre estaba racionalizando progresivamente el mundo. Abriéndose camino entre las tinieblas de la superstición y la ignorancia, la ciencia conquista cada vez más territorios, lo que habría de llevar a una sociedad con mayor conocimiento, virtud moral, justicia y felicidad para el mayor número de personas. En nuestro tiempo, la incapacidad del hombre para universalizar la justicia o impedir la pobreza, y el poder destructivo de las nuevas guerras, de lo que el mal uso de la tecnociencia es en parte responsable, ha planteado interrogantes sobre la fe de los ilustrados en el progreso científico y, sobre todo, moral de la humanidad.

Dogmatismo: En el contexto religioso, se llama dogma a la verdad de fe, es decir, aquel principio que se considera indiscutible y que, presuntamente, no puede someterse al debate racional, siendo reconocido de tal manera por la autoridad eclesiástica. Llamamos dogmática a aquella doctrina, religiosa o no, que se considera incontestable; igualmente, llamamos dogmático a aquél que defiende ciertas ideas –dogmáticas o no- pretendiendo que no pueden discutirse, lo que acerca el dogmatismo al fanatismo.

Escepticismo: (skeptikos: el que observa con atención) Históricamente, la escuela escéptica nace en la Antigua Grecia con el sofista Gorgias, continuando en la época helenística, con Pirrón. Su objetivo era enfrentarse al dogmatismo y propugnaba la conveniencia de "suspender el juicio", es decir, de no pronunciarse ante preguntas sobre grandes principios como si los dioses velan por nosotros o cuál es el bien supremo. Cuando el escéptico se radicaliza, llega a negar la posibilidad de cualquier verdad universalmente válida, de manera que la ciencia siempre será una ilusión humana, tanto como la posibilidad de establecer un conocimiento que no dependa ni del lugar, ni de la época ni de la perspectiva del sujeto. El escéptico radical se entiende así como un "descreído", aquel que ha perdido la fe en la razón y tiende a sumergirse en el cinismo.

Crítica: (kritikós: el que juzga) Todo análisis valorativo, desfavorable o no, es crítico, en la medida en que somete algo a juicio. Es crítica –o tiene "espíritu crítico"- aquella persona que no admite una afirmación sin haberse planteado su validez. El crítico se interroga, pasa por el filtro de la duda cualquier creencia, empezando por las suyas propias, y acaba desechando aquellas que no traspasan dicho filtro.

Hipótesis (hipótesis: lo que se pone en la base de una construcción) Conjetura. Supuesto de verdad que se encuentra todavía en duda, y que habrá de ser después comprobado o desechado a través de la experimentación o de cualquier otro procedimiento demostrativo. El método científico que ha caracterizado a la ciencia moderna desde Newton (método hipotético-deductivo) se sirve por sistema de hipótesis porque estas encaminan la investigación y le dan sentido.

Teoría: En el uso coloquial, llamamos teórico a aquel conocimiento que no está destinado a contrastarse en la práctica, de manera que se le atribuye cierto matiz peyorativo, como si "hablar en teoría" fuera especular o expresarse hipotéticamente. En el ámbito científico llamamos teoría a un sistema de leyes que sirven para explicar cierta clase de fenómenos. Así, hablamos de la "Teoría mecánica clásica", de la "Teoría heliocéntrica" o de la "Teoría de la Evolución"…

Predicción: Enunciado de expectativa, es decir, supuesto o hipótesis de algo que va a suceder. En el terreno científico, la predicción puede no considerarse hipotética si se instala dentro de un marco teórico de leyes contrastadas. Así, puedo decir que Fuerza es igual a masa por aceleración y que mañana lo va a seguir siendo. Existen sin embargo ciencias, por ejemplo la meteorología que son predictivas por definición y sus expectativas tienden a ser hipotéticas porque no pueden asegurarse a priori.

Verificación: Procedimiento científico que determina la verdad de un enunciado hipotético. En las ciencias formales como lógica o matemáticas, la verificación supone el ajuste a las normas del sistema, es decir, la coherencia. En las ciencias experimentales, la verificación se efectúa mediante contrastación empírica.

Falsación. Procedimiento que demuestra la falsedad de un enunciado o teoría. Según algunos pensadores, una teoría puede ser considerada verdadera mientras no es falsada, es decir, que no necesita ser verificada, sino más bien que no se demuestre su falsedad.

Paradigma. (paradeigma: modelo, ejemplo) Desde Platón, se llama paradigma al ideal, es decir, al ejemplo espiritual y de máxima perfección para cualquier ente existente. En la actualidad, el filósofo de la ciencia Thomas S.Kuhn llama así al modelo de trabajo específico de la comunidad científica en una cierta época. Así, ese modelo se inspira en una imagen ejemplar, algo así como un mito fundacional (como el paradigma de Galileo en la ciencia del XVII, el de Aristóteles en la medieval, o el einsteniano en el siglo XX) a partir del cual se hacen comunes en la ciencia normal una serie de métodos, criterios de verdad o estilos enunciativos. Kuhn considera que la ciencia discurre históricamente a golpe de grandes revoluciones o saltos, es decir, uno o varios científicos demuestran con sus descubrimientos y métodos la impropiedad del modelo reinante y, a partir de ahí, la ciencia normal va asumiendo el nuevo paradigma. Esto le lleva a afirmar la teoría de la inconmensurabilidad de los paradigmas, según la cual el conocimiento científico no evoluciona en pos de la verdad a lo largo del tiempo, sino que cada época concibe el mundo de una manera distinta y que no puede ser comprendida por los seres humanos de una época distinta. Así, no entendemos el mundo mejor que un medieval, lo entendemos de una manera distinta, y eso significa que ni nosotros podríamos asimilar nuestra concepción ni él la nuestra.

Libre de/ Libre para: El fenómeno de la libertad humana contiene dos momentos. Nos hallamos "libres de" en tanto que nos quitamos cierto peso de encima, nos liberamos de algo que nos sobra o nos embaraza, limitando la capacidad de maniobra de nuestra voluntad. Una vez libres de algo, somos "libres para", es decir, podemos actuar a voluntad, elegir entre distintas opciones.

Determinismo: Concepción según la cual todo lo que sucede, en especial los hechos debidos a la acción humana, están absolutamente determinados por los hechos precedentes, de tal manera que nada es azaroso o imprevisible. Esto supone que, pese a creernos libres, nuestra conducta está determinada por circunstancias externas o ajenas a nuestra voluntad, de tal manera que la libertad no es entonces sino una ilusión humana.
-Determinismo metafísico. Creencia vinculada a la fe religiosa según la cual la vida –o al menos sus hechos fundamentales- transcurren según un plan trazado por fuerzas sobrenaturales. Así, los antiguos griegos predecían el futuro a través del oráculo, donde se revelaba el plan del destino. Otros muchos pueblos, partiendo del principio de que "todo está escrito", han creído poder interpretar el plan del destino a través de la astrología, la quiromancia o ciertas palabras sagradas. Grandes religiones como el cristianismo establecen cierto tipo de determinismo, normalmente a través de textos sagrados, como cuando advierten la llegada futura de un Mesías salvador.
-Determinismo científico o natural. Partiendo del principio científico de que todo ocurre por un motivo explicable, y la misma causa produce el mismo efecto, entienden que el azar no es sino el nombre que le damos a aquello que todavía la ciencia no es capaz de explicar. Así, decimos que algo sucede aleatoriamente porque no sabemos cuáles son exactamente las causas que lo determinan.

El demonio de Laplace. Teoría determinista que tiende a sobrevalorar las posibilidades explicativas de las ciencias físicas. El optimismo de los ilustrados hizo pensar que si la ciencia podía explicar cada vez mayor cantidad de fenómenos, era imaginable que, en un futuro, el conocimiento absoluto de todos los fenómenos acaecidos y de todas las causas, nos podría permitir predecir todo lo que podría ocurrir en un futuro. Así, Laplace idea la hipótesis de un genio absoluto –un "demonio"- capaz de predeterminar todos los acontecimientos, de tal manera que factores de imprevisibilidad como el azar o la libertad terminarían desapareciendo, desacreditados como simples fantasías. Las ciencias contemporáneas ha abolido esta concepción.
El gen egoísta. Modelo de explicación determinista debido al auge obtenido por la genética desde la segunda mitad del siglo XX. Su autor es el biólogo Richard Dawkins, el cual afirma que los individuos somos "máquinas de genes", es decir, que el mecanismo que realmente gobierna el mundo natural no es nuestra necesidad de supervivencia, sino la de los genes. Durante un tiempo cumplimos la misión de proteger nuestros genes y extenderlos, una vez hecho esto el gen nos deja envejecer y morir porque ya no nos necesita. Así, funciones que consideramos dependientes de nuestra libre voluntad, como la de buscar pareja sexual, comer o buscar un trabajo están de manera directa o indirecta determinadas por la presión a la que somos permanentemente sometidos por el programa genético. En suma, es el gen el que tiene el poder, es él quien aspira a la inmortalidad, nosotros solo somos su herramienta.

Existencialismo. Corriente de pensamiento iniciada en Kierkegaard, seguida por autores como Unamuno o Heidegger, y que tiene su mayor representante en Jean-Paul Sastre. La frase de este último –"la existencia precede a la esencia"- caracteriza a la doctrina existencialista. La idea es que no es algún tipo de género, esencia o concepto colectivo lo que me define, sino el hecho casual de que estoy aquí, de que existo. Así, no soy mujer, católico, español o comunista, antes que eso soy una subjetividad obligada a decidir seguir viviendo y construir su propia vida a cada momento. La angustia vital, ese sentimiento terrible de tener que tomar decisiones respecto a mi propia vida en cada momento, acompaña irremediablemente a la subjetividad humana. El existencialista, frente al determinista, no solo cree en la libertad, es que cree que "solo" somos libertad. El hombre es un ser indeterminado, nada en él está escrito, su vida y su identidad serán aquello que él decida, y habrá de decidirlo todo –incluso seguir con vida a cada momento- sin la excusa de apoyarse en otros. Estará solo ante su propia libertad, condenado paradójicamente a ser libre. La libertad es lo único que no somos libres de elegir, somos libres lo queramos o no.

Valores. El valor se aplica a aquello que consideramos digno de estima y aprecio. En economía se asocia al precio de las cosas. En ética, entendemos que un valor puede ser un modelo o arquetipo digno de admiración y aprecio, de ahí que se hable de una sociedad sin valores cuando se entiende que a nuestras colectividades les faltan ideales.

Código de Hammurabi.
Primero de los grandes sistemas jurídicos y legales de la historia. Fue promulgado por un rey sumerio y exhibido en público con escritura en granito. Contiene cientos de normas, y en especial prohibiciones acompañados de los castigos previstos para su violación, lo que ha creado la imagen del código como un ejemplo de crueldad. Se trata sin embargo de un sistema muy avanzado destinado a asegurar la convivencia.

Ética (ethos, carácter) La ética es la rama de la filosofía que se ocupa de las costumbres y la conducta moral. Su reflexión se ocupa de la fundamentación del bien y del mal, los fines deseables, el deber moral. No se debe confundir con "moral", que es más bien el objeto de estudio de la Ética. La moral es el conjunto de normas de conducta a que me acojo ante una situación que requiere solucionadas no solo técnicas, sino asociadas al deber.




Política. (polis, ciudad) En términos intelectuales, llamamos así a la teoría del estado, la cual consiste en juzgar la bondad o maldad del estado real y proponer el estado ideal determinando las características del régimen político adecuado. En la práctica, llamamos así al arte del gobierno y la gestión del poder.

Poder. En sentido etimológico, lo asociamos a la raíz latina potestas cuando lo entendemos de forma sustantiva, es decir, como el lugar ocupado por quienes de forma efectiva e institucionalizada ejercen el gobierno. En sentido de potentia, se trataría más bien de la facultad o capacidad para actuar. La concepción tradicional –potestas-, también llamada concepción soberanista, trata el Poder como un espacio localizado y estable que podemos asociar al Estado y, si se quiere, al Capital, de manera que el poder se ejerce siempre en vertical, de arriba hacia abajo, de forma jerárquica, estableciendo la relación unilateral entre un polo activo que ejerce el poder y otro pasivo que es su súbdito o víctima. En la concepción contemporánea de Michel Foucault, heredada de Nietzsche y su teoría de la voluntad de poder, el poder es más bien un juego de relaciones, un espacio horizontal sometido a fuerzas que todos ejercemos donde somos algo más que dominadores y dominados. El poder aquí es una microfísica: "el poder está en todas partes, mejor, viene de todas partes". Esta concepción recoge el principio que define el poder como la capacidad de influir sobre los demás. Así, no solo el gobierno propiamente dicho o las relaciones laborales marcadas por el capital son "poder", también lo pueden ser la familia, la escuela, los grupos de amigos… todo es poder en la medida en que todos pugnamos por ejercer influencia sobre los demás.

Legalidad/ Legitimidad. (lex,ley; legalis,legalidad) Es legal lo que se ajusta a la ley establecida, es decir, la acción conforme a la ley que se lleva a cabo no por respeto a la dignidad de la ley misma, sino porque "conviene" cumplirla. Actuar legalmente es ajustarse al Derecho Positivo, es decir, al conjunto de leyes vigentes en una comunidad. Otorgamos legitimidad a lo que se ajusta a la ley moral, es decir, que consideramos legítima o ilegítima una acción en la medida en que la consideramos moralmente aceptable, con independencia de si se ajusta o no al derecho positivo.

Teorías de la legitimación. Actualmente se llama así a toda teoría política. Es aquella doctrina que da razones a favor de un modelo político que está en práctica o que no lo está pero debería aplicarse. Los ideólogos de un sistema defienden el régimen vigente, tratan de demostrar que es el mejor posible, que sus detractores están equivocados y que sería desastroso derribarlo y sustituirlo por otro. Los críticos o revolucionarios, por el contrario, elaboran teorías políticas que aspiran a ser puestas en práctica mediante leyes y normas cuya aplicación y mantenimiento sean garantizadas por las nuevas instituciones.
Por ejemplo, el Apartheid, fue una práctica política aplicada legalmente en la República Sudafricana hasta tiempos recientes. Consistía en excluir por ley a la mayoría negra de los puestos de prestigio y poder, accesibles solo a la minoría blanca. Algunos teóricos legitimaban esta práctica racista basándose en presuntos datos científicos e históricos que proclamaban la inferioridad de la raza negra. En el siglo XVII, el pensador británico Thomas Hobbes, legitimó la práctica de un Estado represor, duro y casi totalitario (asociado en aquel tiempo a la Monarquía Absoluta y en la actualidad a las dictaduras totalitarias), basándose en la presunción antropológica de que "el hombre es malo por naturaleza". Con la idea de que "el hombre es un lobo para el hombre", Hobbes pretendía hacer ver que, si no se nos aterroriza y castiga duramente, tendemos a asesinar o robar al vecino, pues somos por naturaleza egoístas, envidiosos y violentos. En plena Revolución Industrial, Karl Marx defendió la alternativa revolucionaria a la sociedad de clases –el socialismo- basándose en sus estudios de historia, sociedad y economía que demostraban que el capitalismo hacía a la mayoría de la población cada vez más pobre.

Democracia. (demos, pueblo; cratia, gobierno, poder) Se define como aquel régimen en el cual la soberanía reside en los ciudadanos. Su principio es la isonomía, es decir, la igualdad ante la ley.
La democracia es históricamente fundada en la polis de Atenas, en el siglo V antes de Cristo, también llamado Siglo de Pericles. Se trataba de un modelo asambleario o de democracia directa. Los miembros de la asamblea se reunían en el ágora (plaza pública) y en los tribunales, y decidían las leyes y medidas de gobierno por votación inmediata.
Este modelo restringía sin embargo la condición de ciudadano con derecho a participar en la asamblea a un porcentaje de personas restringido, negándoselo a mujeres, esclavos y extranjeros.
La democracia moderna ha perdido su carácter asambleario, convirtiéndose en democracia indirecta, representativa o parlamentaria. Organizaciones de expertos en gobernar o profesionales de la política denominadas Partidos compiten entre sí cíclicamente para obtener la representación parlamentaria, de manera que los ciudadanos delegan sobre ellos la responsabilidad de legislar y gobernar. La pérdida del ágora ha restado protagonismo y poder de decisión al pueblo –lo que plantea interrogantes sobre el sentido etimológico del término "democracia"-, pero también es cierto que no restringe la isonomía y la participación política como el modelo ateniense. Además, las constituciones modernas suelen prever la posibilidad del referéndum, consulta –vinculante o no- en la que cada ciudadano se pronuncia directamente sobre una cuestión trascendental para el Estado.

Mesianismo. Creencia difundida por los profetas en la venida del Mesías, un liberador que salvará a los hombres del Mal en el mundo y construirá el Reino de Dios en el mundo. El término suele extenderse desde la religión a la política para aplicarse a doctrinas que, como el nazismo o el marxismo, anuncian la liberación y un futuro de felicidad en una nueva edad de oro.